viernes, 31 de marzo de 2017
Porque el Partido Colorado debe expulsar al Dr. Francisco Sanabría
El Dr. Francisco Sanabría, era un prominente dirigente del Partido Colorado, hasta que decidió renunciar a todos los cargos que ostentaba incluso el de convencional departamental y nacional.
Lo hizo acorralado por una acuciante situación financiera, cuasi quebrado, en el ejercicio de una actividad lícita y otras ilícitas o no autorizadas.
El Dr. Sanabría entendió que debía renunciar cuando estaba a punto de estallar un escándalo de dimensiones que hacían incompatible representación política alguna.
Evidentemente Francisco Sanabría debió mantenerse al margen de las actividades partidarias al tiempo que tenía manejos de fondos sin la correspondiente indagatoria de su procedencia, haciendo caso omiso a la normativa banco centralista y al control del lavado de activos a la que deben sumarse todos los que intermedian con bienes y servicios sean profesionales o no.
Pero el objetivo de esta nota, no es analizar cuán al margen de la ley actuó un connotado dirigente partidario, ni si los controles del BCU no existieron para detectar una Casa Cambiaría que tomaba depósitos, siendo que esta actividad esta expresamente prohibida para las casas de cambio.
No, no es el objetivo buscar una justificación para el que hoy es indagado por la justicia, ni echar sombras sobre lo actuado por la autoridad financiera por no controlar las actividades de las casas de cambio, en particular al Cambio Nelson.
El asunto va más allá, de este triste insidente.
La historia del Partido Colorado es ampliamente superadora en su obra y legado a la sociedad en su conjunto, de hechos de corrupción o corruptela que se hayan producido bajo sus gobiernos. Los hubieron y fueron de público conocimiento. En todos los casos se apartaron a los responsables de sus filas y nunca se intento tapar el sol con la mano ni siquiera en aquella desviación, que significó regalar unas bolsas de Portland a un club deportivo. Esta bien no se puede ser generoso con los dineros publicos, por pequeño que sea el apartamiento.
Sin embargo la predica de los militantes de la izquierda de los años de la recuperación democrática era: "sos Colorado sos corrupto".
Vaya a saber que pueden estar pensando aquellos que con tanta vehemencia levantaban tan canallesca imputación, cuando el Frente Amplio en el gobierno no ha podido enterrar al flagelo de la corrupción y por el contrario han habido sobrados casos de manejos de los dineros públicos con absoluta discrecionalidad e ilegalidad y que han sido denunciados penalmente por los cuatro partidos de oposición.
Si el Partido Colorado se beneficio en el pasado con fondos para su campaña donados por empresarios-políticos que desarrollaban actividades ilícitas, que a su vez se erigieron como dirigentes del partido, buscando ocupar lugares de destaque llegando a ser Secretario General Departamental, actuando como diputado suplente, habiendo ingresado a la cámara en varias oportunidades, dado el flexible sistema de licencias que rige la cámara de representantes. Dando un accionar a su vida pública, que no impedían al "millonario" dirigente, cumplir con sus responsabilidades partidarias y desarrollar un sinnúmero de negocios fallidos, casas de cambio, arrendadoras de autos, agencias de viaje, ondas radiales, actividad agropecuaria, negocios inmobiliarios, todas provenientes de la herencia de su padre el ex-senador Wilson Sanabría.
Porque lo eligieron entonces como secretario general del CED de Maldonado?
Más allá de la respuesta en defensiva que puedan darnos sus ex amigos en relación a su caudal electoral, es obvio y hasta dable esperar que había una proyección política de su persona sino fuera por el descalabro que sobrevino sobre sus espaldas 3 años después de ser electo suplente de diputado que ingreso a la cámara en varias oportunidades.
Si bien las actividades ilícitas de Francisco Sanabría y su vida privada de lujos, el Partido Colorado no tenia porque estar al tanto, las aportaciones a la campaña del Partido fueron notorias y no me refiero al balance presentado en la Corte Electoral que indica que FS colaboro con el Partido en $ 250.000.- sino al despliegue de campaña que no se declara y no figura en los balances de muchas agrupaciones.
No fueron precisamente campañas de bajo costo las que participaron Wilson Sanabría primero y Francisco Sanabría últimamente.
La gran inversión en las campañas electorales para lograr un cargo electivo desdibuja la democracia y la convierte en lugar de ser el gobierno del pueblo en gobierno de las élites del marketing político.
Los minutos de televisión en función del peso electoral es una máquina de impedir visibilidad a las nuevas formaciones políticas.
El costo del minuto de televisión hace inaccesible a sectores políticos sin respaldo económico a una comunicación masiva con la ciudadanía.
Sin desmedro de la comunicación directa con los electores vía Internet, aplicaciones, redes sociales, etc
Por ende las organizaciones políticas se exponen inconcientemente a ser financiadas por dinero negro, en la medida que no existe limitación alguna al aporte no declarado en las rendiciones de cuenta de las listas a la Corte Electoral.
Quizá sea una línea de trabajo a impulsar referida al financiamiento de los partidos políticos.
Ahora bien los low cost políticos, siempre o por lo general son el grupo perdidoso en las campañas, a los que siempre o por lo general los grupos mayoritarios se han encargado de absorver o cuando no lisa y llanamente ignorarlos. Sin embargo siempre o casi siempre los grupos que pierden la elección a la interna del partido son los que paradójica mente aportan sus votos para la obtención de las bancas de diputados o ediles en el caso departamental a los grupos que se alzan con la mayoría interna partidaria.
Por tanto como me dijo un día un compañero tacuaremboense "el partido es muy duro con los que pierden".
Las agrupaciones que quedan relegadas en una elección continúan actuando y militando en el partido, siguen levantando su bandera colorada y en circunstancias no se encuentran mecanismos orgánicos de gobierno del partido que implíque una coordinación de dichas agrupaciones minoritarias sin representación parlamentaria con los diputados y ediles electos.
En el día de hoy en unas horas el Partido Colorado tendrá en la Convención Nacional la expresión de su máxima autoridad, integrada por 601 convencionales nacionales tras el fallecimiento del Dr. Jorge Batlle que al igual que el Dr. Julio Maria Sanguínetti la integraba en su calidad de ex-presidente.
Cuando proponemos la expulsion del Dr. Francisco Sanabria, renunciante del Partido Colorado, parecería que no se puede expulsar a alguien que previamente ha presentado su renuncia.
En realidad es un acto libre de nuestro partido. La expulsión se hace para que no existan dudas del posicionamiento ético y moral del Partido.
Un renunciante eventualmente podría volver a afiliarse al partido por tanto la expulsión es lo mas justo dado el daño moral que se le ha inflijido al Partido Colorado y a todos sus militantes.
Cuando expulsamos a Sanabría de nuestras filas estamos comunicando para adentro y para afuera del Partido que nuestro Partido no cobija ni apaña personas que desarrollan actividades por fuera de la ley, bajo sospecha de lavado de activos y manejo de dinero de dudosa procedencia. No alberga ni albergara nuestro partido a fugados de la justicia.
Por este y otros motivos, a pesar de que Sanabría haya renunciado el Partido Colorado debe votar su expulsión.- El Partido Colorado Partido de hombres libres y honrados. Viva Batlle!!!
Daniel Isi
Convencional
Nacional
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